Por Gerardo Cartagena Crespo
Tema Segundo
La jerarquí en la Iglesia que Cristo fundó y querido por Dios, para conservar su unidad, estabilidad y orden moral y doctrinal
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NOTA. Importante tener Biblia en mano para búsqueda y estudio de los textos. Para que puedas entender lo que aquí se dice y se afirma, es importante buscar y leer los textos bíblicos. Se hace así para estimular el uso de la Biblia. Si no tienes una Biblia a manos copia el texto y utiliza el buscador, por ejemplo el de Google.
Toda institución humana (gobiernos, corporaciones, entidades cívicas y privadas, grupos y asociaciones en general) para que funcione y mantenga su unidad, requiere de un cuerpo gobernante o dirigente que organice, estabilice y mantenga el orden y evite así la anarquía.
Cuando Cristo funda su Iglesia la funda sobre seres humanos imperfectos. Aunque la Iglesia es divina por su fundador, Jesucristo, es humana pues quienes la constituyen y conforman son hombres y mujeres, no ángeles. Ante esta realidad y el peligro ante las imperfecciones y debilidades humanas (que se dejan sentir ya temprano en la Iglesia. Sólo hay que ver las cartas de San Pablo y las cartas al comienzo del Apocalipsis para darnos cuenta de esta realidad), existe el riezgo de que la Iglesia sosobre de ésta no tener un cuerpo gobernante que la dirija y guíe con una cabeza o jefe al frente de dicho cuerpo dirigente.
Habrá quien dirá que, el Espíritu Santo es quien guía y dirige la Iglesia, por lo tanto eso de la jerarquía o cuerpo gobernante es de inspiración humana, no divina.
Ante esta objeción se impone la realidad de los hechos. Si miramos el protestantismo que asegura haber sido de inspiración divina y, por consiguiente, el Espíritu Santo lo guía, vemos cómo a lo largo de los años se ha ido dividiendo y fragmentando en comunidades independientes con interpretaciones diversas de la única Palabra de Dios. No puede el Espíritu Santo ser el autor de tanto desorden y confución contrario a la misma Palabra de Dios. Algo parecido podemos observar en las iglesias ortodoxas dividida en iglesias regionales.
Por consiguiente, ante tal peligro, se impone la necesidad de un cuerpo gobernate para mantener la unidad y estabilidad, el orden y la confianza en la verdad que la Iglesia custodia y enseña.
Veamos si efectivamente Jesucristo establece los cimientos de una jerarquía que irá creciendo y desarrollándose según las circunstancias y necesidades de la Iglesia lo exigen, o simplemente todo queda en un juego de palabras cuyo fruto sería la independencia de las diversas comunidades cristianas en congregaciones aisladas al estilo protestante, cuya consecuencia sería la anarquía de la fe y oscurecimiento de la verdad.
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Toda institución humana (gobiernos, corporaciones, entidades cívicas y privadas, grupos y asociaciones en general) para que funcione y mantenga su unidad, requiere de un cuerpo gobernante o dirigente que organice, estabilice y mantenga el orden y evite así la anarquía.
Cuando Cristo funda su Iglesia la funda sobre seres humanos imperfectos. Aunque la Iglesia es divina por su fundador, Jesucristo, es humana pues quienes la constituyen y conforman son hombres y mujeres, no ángeles. Ante esta realidad y el peligro ante las imperfecciones y debilidades humanas (que se dejan sentir ya temprano en la Iglesia. Sólo hay que ver las cartas de San Pablo y las cartas al comienzo del Apocalipsis para darnos cuenta de esta realidad), existe el riezgo de que la Iglesia sosobre de ésta no tener un cuerpo gobernante que la dirija y guíe con una cabeza o jefe al frente de dicho cuerpo dirigente.
Habrá quien dirá que, el Espíritu Santo es quien guía y dirige la Iglesia, por lo tanto eso de la jerarquía o cuerpo gobernante es de inspiración humana, no divina.
Ante esta objeción se impone la realidad de los hechos. Si miramos el protestantismo que asegura haber sido de inspiración divina y, por consiguiente, el Espíritu Santo lo guía, vemos cómo a lo largo de los años se ha ido dividiendo y fragmentando en comunidades independientes con interpretaciones diversas de la única Palabra de Dios. No puede el Espíritu Santo ser el autor de tanto desorden y confución contrario a la misma Palabra de Dios. Algo parecido podemos observar en las iglesias ortodoxas dividida en iglesias regionales.
Por consiguiente, ante tal peligro, se impone la necesidad de un cuerpo gobernate para mantener la unidad y estabilidad, el orden y la confianza en la verdad que la Iglesia custodia y enseña.
Veamos si efectivamente Jesucristo establece los cimientos de una jerarquía que irá creciendo y desarrollándose según las circunstancias y necesidades de la Iglesia lo exigen, o simplemente todo queda en un juego de palabras cuyo fruto sería la independencia de las diversas comunidades cristianas en congregaciones aisladas al estilo protestante, cuya consecuencia sería la anarquía de la fe y oscurecimiento de la verdad.
Argumento I: Cristo elige doce hombres de entre el resto de los discípulos para una misión especial.
a. Marcos 3, 13-15: "Subió al monte y llamó a los que él quiso; y vinieron donde él. Instituyó Doce, para que estuvieran con él, y para enviarlos a predicar con poder de expulsar los demonios."
¿Por qué Jesús escoge, de entre sus discípulos, doce hombres a quienes de un modo especial da cierta autoridad y a quienes da la interpretación de las parábolas? ¿No hubiese sido mejor haberlo hecho con todos los discípulos, sin distinción de personas?
Aquí podemos hacer muchas interpretaciones e igual cantidad de conclusiones (como de hecho se han dedicado a hacer los no católicos). Como católico, y según la doctrina católica al respecto, me inclino a pensar e interpretar que, lo que Cristo buscaba era establecer, dentro de sus discípulos, rebaño o Iglesia, un grupo que le representase y fuese capaz de mantener la unidad (tantas veces predicada y exigida en el Nuevo Testamento) de la Iglesia. Con ello Cristo evitaría la anarquía y el relativismo de la fe, realidad ésta fundamento y base del protestantismo.
De Jesucristo no haber querido un cuerpo gobernante para su Iglesia, simplemente se hubiese conformado con rodearse de todos los discípulos en general y a ellos encargar la misión de evangelizar sin ninguna elección preferencial. El hecho de que Cristo haya elegido, después de estar toda la noche en oración, a doce hombres de entre todos sus discípulos, dice mucho de su propósito e intención. ¿Existe alguna evidencia bíblica que confirme la interpretación católica?...
De Jesucristo no haber querido un cuerpo gobernante para su Iglesia, simplemente se hubiese conformado con rodearse de todos los discípulos en general y a ellos encargar la misión de evangelizar sin ninguna elección preferencial. El hecho de que Cristo haya elegido, después de estar toda la noche en oración, a doce hombres de entre todos sus discípulos, dice mucho de su propósito e intención. ¿Existe alguna evidencia bíblica que confirme la interpretación católica?...
Argumento II: Los Apóstoles son las columnas de la nueva Jerusalén, o sea, la Iglesia.
a. Apocalipsis 21, 14
b. Efesios 2, 19-20
Estos textos confirman que, efectivamente los Apóstoles fueron escogidos por Jesucristo para una misión especial: el ser columnas visibles de la Iglesia y custodios de la verdad, realidad ésta respaldada por la misión de envío.
Argumento III: Establecimiento de la jerarquía en la Iglesia.
a. Hechos 14, 23
La designación de ancianos o presbiteros para estar al frente de la Iglesia es un claro signo de que los Apóstoles sí entendieron el propósito de Cristo al escoger doce hombres de entre sus discípulos.
b. Tito 1, 5
Si San Pablo manda a su discípulo Tito a que estableciera ancianos o presbiteros al frente de cada ciudad en Creta, es porque efectivamente el Espíritu Santo estaba guíando a la Iglesia en esa dirección, la de establecer un cuerpo gobernante para la Iglesia naciente.
Lo interesante de este texto es que, podemos observar la autoridad de San Pablo sobre Tito quien está encargado de pastorear la Iglesia en Creta, pues éste recibe ordenes de Pablo para la organización jerárquica en dicha comunidad cristiana. Si San Pablo lo ha hecho con Tito, hemos de suponer que también lo habrá hecho con sus demás discípulos. Y lo mismo habrán hecho los demás Apóstoles.
El siguiente texto nos da más luz al respecto...
c. Hechos 20, 28-29
Este texto es clave para entender y ver que, efectivamente la jerarquía no solamente es una realidad en la Iglesia, sino que es una obra querida y establecida por Dios por el Espíritu Santo.
El hecho de que estos obispos hayan sido puestos por el Espíritu Santo como cabezas de la Iglesia, es signo de que realmente la Iglesia fue constituida, fue fundada sobre un cuerpo gobernante a quienes se les debe obediencia (como veremos más abajo).
La importancia de este texto es clave para entender el establecimiento y desarrollo de la jerarquía en la Iglesia. Veamos:
¿Qué dice el texto? Texto tomado de la Biblia Reina-Valera -1960- (ed. protestante).
a. "Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño...
San Pablo exhorta a los dirigentes y les hace ver cuál es su misión con respecto al rebaño del Señor, es decir la Iglesia que Cristo fundó.
b. "en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos,...
San Pablo les recuerda que su ministerio y misión no es obra de hombres ni que ellos están ahí por cuenta propia, sino que fueron elegidos para tan grande misión por el Espíritu Santo, por consiguiente, así como ellos tienen la grave responsabilidad ante Dios de pastorear (guiar, dirigir, cuidar) la Iglesia, así la Iglesia está llamada, de igual manera ante Dios, de escuchar, respetar y obedecer a sus legítimos pastores.
De igual manera, sólo pueden ser legítimos pastores aquellos que han sido puestos por el Espíritu Santo. Y ¿quiénes son esos? ¿cómo reconocerlos? Son aquellos cuyo ministerio lo han recibido desde y directamente de los Apóstoles, no después. Y ¿cómo saber que es así? Por la imposición de manos, tal y como vemos reflejado en la Sagrada Escritura y que veremos más abajo, por el que se transmitía dicho ministerio. Sólo los pastores católicos y ortodoxos poseen desde los Apóstoles, por imposición ininterrumpida de manos, tal encargo. Todos los demás (protestantes por ejemplo) son falsos pastores autoimpuestos sin el mandato del Espíritu Santo. Por eso, ante esta realidad, las constantes y continuas difamaciones y calumnias contra la Iglesia que Cristo fundó, la Iglesia Católica, para encubrir el origen humano de sus pretendidas autoridad autoimpuesta.
c. "para apacentar la iglesia del Señor,...
Esta es la funsión de los dirigentes de la Iglesia, velar por el bien de la Iglesia y el custodio y propagación del Evangelio en la Iglesia y desde la Iglesia para el mundo entero.
d. "la cual él (Jesucristo) ganó por su propia sangre".
Esta es la Iglesia que los pastores puestos por el Espíritu Santo deben pastorear, la Iglesia que Cristo fundó en la Cruz del Carvario y a quienes Jesús prometió que estaría con ellos "todos los días hasta el fin del mundo" (Mateo 28,20). Esta es la Iglesia que ha existido desde los Apóstoles y a lo largo de los siglos hasta hoy y hasta el fin del mundo. De aquí que, los que no pertenecen a esta Iglesia, sino a "iglesias" fundadas por hombres a lo largo de los siglos, se esfuerzan por desacreditarla, demonizarla e inventar toda clase de teorías y fábulas para justificar la existencia de sus propios grupos que, por más que aseguren ser bíblicas, están al margen y en oposición de la Biblia.
Argumento IV: Ejercicio jerárquico y de autoridad de la Iglesia.
a. Hechos 15,1ss
Preguntas de reflexión:*¿Qué nos dice el texto?
*¿En qué parte del texto se verifica que los apóstoles ejercen su autoridad?
*¿Utilizan la Biblia como única fuente de autoridad? ¿el Antiguo Testamento? ¿el Nuevo Testamento? ¿por qué?
Léase el capítulo hasta el versículo 35 y estudiese con detenimiento, especialmente los versículos "24 Por cuanto hemos oído que algunos que han salido de nosotros, a los cuales no dimos orden, os han inquietado con palabras,..." y "28 Porque ha parecido bien al Espíritu Santo, y a nosotros, no imponeros ninguna carga más que estas cosas necesarias:..."
Notemos el lenguaje utilizado por el que expresan desaprobación ante una desición tomada por algunos miembros de la Iglesia (judíos conversos) sin la previa autorización de los Apóstoles. Con esta acción están reconociendo una autoridad que han recibido de Dios (como veremos en textos más abajo), autoridad que, junto con el Espíritu Santo, ejercen para el beneficio de la Iglesia. Sin esta autoridad (como se lee en este caso y las diferentes situaciones que van surgiendo en la Iglesia como leemos en algunos casos narrados por San Pablo), la Iglesia se hubiese desquebrajado e irremedianblemente dividido en fracciones independientes puesto que, un grupo por falta de dirigentes constituídos en un cuerpo gobernante, hubiese desembocado en ello.
Argumento V: Modo como se trasmite el orden sagrado establecido por Cristo.
*En el Antiguo Testamento
a. Números 27,15-23: "Habló Moisés a Yahveh y le dijo:
«Que Yahveh, Dios de los espíritus de toda carne, ponga un hombre al frente de esta comunidad, uno que salga y entre delante de ellos y que los haga salir y entrar, para que no quede la comunidad de Yahveh como rebaño sin pastor.»
»Respondió Yahveh a Moisés: «Toma a Josué, hijo de Nun, hombre en quien está el espíritu, impónle tu mano, y colócalo delante del sacerdote Eleazar y delante de toda la comunidad para darle órdenes en presencia de ellos y comunicarle parte de tu dignidad, con el fin de que le obedezca toda la comunidad de los israelitas. Que se presente al sacerdote Eleazar y que éste consulte acerca de él, según el rito del Urim, delante de Yahveh. A sus órdenes saldrán y a sus órdenes entrarán él y todos los israelitas, toda la comunidad.»
»Moisés hizo como le había mandado Yahveh: tomó a Josué y lo puso delante del sacerdote Eleazar, y delante de toda la comunidad. Le impuso su mano y le dio sus órdenes, como había dicho Yahveh por Moisés".
*En el Antiguo Testamento
a. Números 27,15-23: "Habló Moisés a Yahveh y le dijo:
«Que Yahveh, Dios de los espíritus de toda carne, ponga un hombre al frente de esta comunidad, uno que salga y entre delante de ellos y que los haga salir y entrar, para que no quede la comunidad de Yahveh como rebaño sin pastor.»
»Respondió Yahveh a Moisés: «Toma a Josué, hijo de Nun, hombre en quien está el espíritu, impónle tu mano, y colócalo delante del sacerdote Eleazar y delante de toda la comunidad para darle órdenes en presencia de ellos y comunicarle parte de tu dignidad, con el fin de que le obedezca toda la comunidad de los israelitas. Que se presente al sacerdote Eleazar y que éste consulte acerca de él, según el rito del Urim, delante de Yahveh. A sus órdenes saldrán y a sus órdenes entrarán él y todos los israelitas, toda la comunidad.»
»Moisés hizo como le había mandado Yahveh: tomó a Josué y lo puso delante del sacerdote Eleazar, y delante de toda la comunidad. Le impuso su mano y le dio sus órdenes, como había dicho Yahveh por Moisés".
*En el Nuevo Testamento. Nótese el paralelismo entre ambos Testamentos
a. 1Timoteo 4, 13-14: "No descuides el carisma que hay en ti, que se te comunicó por intervención profética mediante la imposición de las manos del colegio de presbíteros".
Importante leer los siguientes textos:
b. 1Timoteo 5, 22
c. Hechos 13,2-3
d. Hechos 8,17-20
c. Hechos 13,2-3
d. Hechos 8,17-20
En los textos anteriores vemos cómo se transmite, por la imposición de manos, la autoridad del ministerio del gobierno apostólico a las siguientes generaciones de discípulos escogidos para desempeñar tal cargo.
Esta acción es testimonio evidente de que el ministerio de pastoreo y autoridad en la Iglesia, contrario a lo que opinan no católicos, NO murió con la muerte de los Apóstoles, sino que continuó y continúa hoy hasta el fin del mundo.
Sólo son legítimos pastores y representantes de Cristo los que, a lo largo de los siglos e ininterrumpidamente, han recibido dicho encargo, por la imposición de las manos, de pastorear la Iglesia.
A continuación un claro ejemplo de la creación de un ministerio dentro del cuerpo dirigente con el fin de ayudar a los Apostoles y atender las necesidades de la Iglesia:
e. Hechos 6, 1-6
Como hemos visto la autoridad apostólica se extiende a todos los servicios en la Iglesia, y no da espacio a opiniones personales e interpretaciones privadas que desembocarían de seguro a una Iglesia fragmentada.
Argumento VI: Autoridad de la Iglesia
Los siguientes textos nos indican que, efectivamente la Iglesia, y en ella los Apóstoles y sucesores, recibió de Cristo una autoridad legislativa y judicial para el recto gobierno de la Iglesia. Si Cristo no hubiese querido dar tal autoridad no hubiese dado el poder de atar y desatar.
a. Mateo 18, 15-18
Preguntas de reflexión:*¿Qué nos dice el texto?
*¿Qué significa atar y desatar?
*¿Qué quiere decir atar y desatar en la tierra y atar y desatar en el cielo? ¿qué relación hay?
*¿A qué tipo de autoridad se refiere?: de gobierno y, por lo tanto, real; o figurada y, por lo tanto, fingida.
*Si es figurada o fingida, ¿qué palabra lo indicaría y por qué? Palabra clave: «Yo os aseguro.»
Lo interesante e impresionante de esta autoridad que Cristo confiere a la Iglesia de atar y desatar (al igual que Mateo 16,19) es que, tal autoridad no se detiene en esta tierra, sino que es extensiva al "reino de los cielos". Luego la autoridad depositada en la Iglesia y a los Apóstoles representados en Simón-Pedro, es una autoridad divina a la que, por consiguiente, todos los fieles de la Iglesia deben respeto y obediencia. Y esta realidad se puede entender por lo siguiente:
b. Lucas 10, 16
*¿Qué relación hay entre este texto y el anterior de Mateo 18, 18?
Jesús es bien claro al indicar con este gesto ("quien a ustedes escucha, a mí me escucha; y quien a ustedes rechaza, a mí me rechaza...") que ellos, sus Apóstoles y discípulos en el ejercicio de su ministerio, en la Iglesia y para la Iglesia, le están representando a él y, por consiguiente, cada miembro de la Iglesia tiene que escucharles y obedecerles. Este gesto indica que Cristo le confiere a su Iglesia el poder y autoridad de enseñar y dirigir en su Nombre. Sólo y únicamente a su Iglesia, la que él fundó.
c. ¿Se debe obedecer a la autoridad eclesiástica?
Ver: Hebreos 13, 17; 1Tes. 5, 12.
En ambos textos se ve claro que la Iglesia reconoce la autoridad que Cristo otorgó a sus representantes y que, por consiguiente, ésta tiene la obligación de reconocerles y sujetarse a ellos. Importante que se lean estos textos.
En ambos textos se ve claro que la Iglesia reconoce la autoridad que Cristo otorgó a sus representantes y que, por consiguiente, ésta tiene la obligación de reconocerles y sujetarse a ellos. Importante que se lean estos textos.
Argumento VII: El papado, cabeza visible de unidad y estabilidad doctrinal, y vicario o representante de Cristo en la tierra.
Nota. Para estudiar el primado de Pedro a profundidad en la Biblia y la Historia, enlace más abajo. Aquí te presento los textos bíblicos y preguntas de reflexión.
Si, como hemos visto, la Iglesia fue constituida con un cuerpo gobernante que representa a Cristo, este cuerpo gobernante para que mantenga la unidad según definida bíblicamente y se evite así el descalabro de la Iglesia, requería de una cabeza de unidad capaz de así hacerlo.
1. Cabeza y fundamento visible de la Iglesia de Cristo.
a. Mt. 16, 13-17
Preguntas de reflexión:
*¿Qué nos dice el texto?
*¿Qué valor tiene la confesión de fe de Simón?
*¿Qué significado y qué valor tiene el que no ha sido revelado ni por la carne ni por la sangre, sino por el Padre?
b. Mt. 16, 18
Preguntas de reflexión:
*¿Qué nos dice el texto?
*Según la estructura de la oración y el ritmo que lleva, a quién va dirigida la expresión: «y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia», ¿Jesucristo o Simón?
*¿Por qué Jesucristo le cambia el nombre a Simón por el de Piedra o Cefas (Juan 1, 42)?
*Como referencia busca y lee: Génesis 17, 3-8 y 32, 29.
Palabra clave: Yo a mi vez te digo.
c. Mt. 16, 19a
Preguntas de reflexión:
*¿Qué nos dice el texto?
*¿Qué significa las llaves del Reino?
*Como referencia busca y lee: Isaías 22, 15-22.
Palabra clave: A ti te daré.
d. Mt. 16, 19b
Preguntas de reflexión:
*¿Qué nos dice el texto?
*¿A qué tipo de autoridad se refiere?
*¿A quién va dirigida dicha autoridad?
*Si Jesucristo no hubiese querido a Simón como cabeza visible de su Iglesia, ¿por qué dijo lo que dijo y por qué le entrega esta autoridad tanto de las llaves como el de atar y desatar?
*Relaciona este texto con los de Mateo 18, 18 y Lucas 10, 16.
*¿Qué significa que en estos textos Cristo comunica la autoridad a toda la Iglesia, mientras que en Mateo 16 dicha autoridad es exclusiva para Simón Pedro?
*Antes de que pases a la conclusión personal del autor, ¿cuál sería tu conclusión de todo el texto de Mateo 16, 13-19?
Conclusión: La globalidad del texto de Mateo 16, 13-19 indica y señala un propósito: Cristo interroga a sus discípulos sobre su identidad: qué piensa la gente y qué piensan ellos; Simón, como respuesta, confiesa que él es el Mesías y el Hijo de Dios; Jesús reconoce en dicha confesión de fe una manifestación de la voluntad del Padre por el que es señalado Simón; Jesús procede a cambiarle el nombre por el de Cefas (del arameo »piedra) tal y como Dios lo hizo con los Patriarcas para manifestar la misión a la que eran llamados; luego, según la estructura y ritmo de la oración, Jesucristo edificará su Iglesia sobre la Piedra señalada por el Padre: Simón; por lo que Jesús procede a entregarle a Simón Pedro el poder de las llaves del Reino, que es el equivalente al poder ejecutivo o de gobierno sobre la Iglesia; luego le entrega el poder legislativo y judicial representado en el atar y desatar.
Ahora bien, para que la interpretación protestante a este texto tenga validez en contra de la interpretación católica y, por lo tanto, en contra de la primacía de Pedro y, con él, del Papado, Cristo debió haber dicho, más o menos, lo siguiente: «Feliz eres Simón, hijo de Juan,... Y yo a mi vez te digo: Yo soy la roca sobre la cual edificaré mi Iglesia... Yo tengo en mis manos las Llaves del Reino de los Cielos. Todo lo que yo ato, nadie puede desatar; todo lo que yo desato, nadie puede atar.»
2. Vicario y Pastor de la Iglesia de Cristo.
Los siguientes textos son clave para dejar establecido y totalmente claro y fuera de toda duda que, efectivamente Jesucristo sí dejó a Simón Pedro como cabeza de la Iglesia y vicario suyo.
a. Apacentar la Iglesia: Juan 21, 15-17
Preguntas de reflexión:
*¿Qué nos dice el texto?
*¿Quienes son los corderos y las obejas y qué entidad conforman?
*¿Por qué Jesús le insiste por tres veces a Simón Pedro que apaciente y cuide de su rebaño?
*Si Jesús no hubiese querido un pastor visible para su Iglesia, ¿hubiese hecho lo que hizo con Simón Pedro al ponerlo al frente del rebaño?
*Palabras claves: Apacienta, cuida, corderos, ovejas, ¿me amas más que estos?
b. Confirmar en la Fe a la Iglesia: Lucas 22, 31-32
Preguntas de reflexión:
*¿Qué nos dice el texto?
*¿Por qué esta orden es sólo y exclusivamente a Simón Pedro y no a los demás apóstoles?
Palabra clave: confirma.
3. Analiza todas estas pruebas a modo de argumentos convergentes y saca tu propia conclusión.
Conclusión: La lógica nos dice que, de Jesucristo no haber querido este tipo de gobierno y autoridad para su Iglesia, simplemente no lo hubiese mencionado; se hubiese ahorrado el tener que escoger a los apóstoles y se hubiese limitado a enviar sólo discípulos; y, sobre todo, no hubiese dado tales poderes.
Argumento VIII: Otros poderes específicos de los apóstoles.
1. Para consagrar: 1Corintios 11, 23-29.
2. Para perdonar los pecados: Juan 20, 19-23.
Preguntas de reflexión:*¿Qué nos dice los textos?
*Busca y lee los textos y estudialos a la luz de lo que hasta ahora se ha dicho.
Argumento IX: Infalibilidad de la Iglesia de Cristo y del Papado.
1. «Quien a vosotros os escucha, a mí me escucha; y quien a vosotros rechace, a mí me rechaza...» (Lucas 10, 16).
Es así que estos hombres escogidos por Cristo son constituidos en sus representantes en la tierra. Si los protestantes y afiliados no lo quieren aceptar, es porque sus pensamientos son de este mundo y NO del Espíritu de Dios.
2. Atar y desatar: A la Iglesia (Mateo 18, 18); A Simón Pedro (Mateo 16, 19).
El poder de atar y desatar confirma el ministerio de gobierno y autoridad en la Iglesia; autoridad que es respaldada "en el cielo".
3. Por virtud del Espíritu Santo (Juan 14, 25; 16, 12-13).
No sólo ellos, sino con la asistencia del Espíritu Santo que la verdad será custodiada en la Iglesia y por la Iglesia. Y es en el nombre del Espíritu Santo que la Iglesia ejercerá su autoridad y la propagación y anuncio del Evangelio de Jesucristo.
Conclusión: De esta manera Dios nos asegura que toda la verdad por él revelada y encargada a la Iglesia (Mateo 28, 18ss; Efesios 3, 8-11), llegará íntegra y en su totalidad para todos aquellos que sinceramente la buscan.
Nota. Ahora te invito a: El primado de Pedro a profundidad en la Biblia y la Historia.
Más sobre la jerarquía de la Iglesia Católica. Excelente tratado y muy completo:
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