La Biblia, la Palabra de Dios escrita

La Biblia, la Palabra de Dios escrita
Las Santas Escrituras son fuente inagotable de eterna sabiduría que, por la acción del Espíritu Santo, la Iglesia nos la interpreta, nos la enseña y nos invita a vivirla.

La Biblia, El Corán y El Libro de Mormón

Confiabilidad de libros sagrados según sus autores / análisis y reflexión
Gerardo Cartagena Crespo




Ante la confusión actual de que si todas las religiones son iguales, que da lo mismo pertenecer a una que a otra, que sus libros sagrados tienen el mismo valor..., aquí te presento el siguiente análisis y reflexión que ayudará a discernir y llegar a una conclusión, lo más objetiva posible, de si las interrogantes anteriores son correctas o no.

Para ello haremos un análisis comparativo de tres libros considerados sagrados por sus respectivos creyentes y ver, según el testimonio de sus respectivos autores, qué tan confiables pueden ser. Aquí no se pondrá en duda la sinceridad de los autores pues ese juicio es exclusivo de Dios, sino el grado de confiabilidad objetiva que puede ofrecer un único autor o varios de ellos.o

Nota. 1. Aquí no pretendo probar cuál de los libros es realmente de inspiración divina (aunque puede ser de ayuda para inferir tal inspiración), sino el grado de confiabilidad según el testimonio humano. Aunque la parte subjetiva siempre va a estar presente, hay una parte objetiva que ayudará a identificar el grado de confiabilidad como puede ser el número de autores y testigos en la elaboración y formación de cada libro. 2. Este mismo análisis realizado en estos tres libros se puede aplicar a otros escritos considerados sagrados utilizando la Biblia como marco de referencia.

*Lo primero que hay que saber con relación a la Biblia es que ésta no cayó del cielo; *ningún ángel ni ser divino estuvo dictando el contenido a los escribas (a diferencia de quienes aseguran de sí tanto el autor del Libro de Mormón como el del Corán); *cada autor bíblico, según enseña la Iglesia Católica, fue inspirado por Dios para escribir aquello que Dios quiso quedara consignado y cuyo contenido en la materialidad de las palabras contuviera las verdades de fe que hay que creer para conocer a Dios y su plan de salvación. Verdades contenidas en los diversos géneros literarios utilizado por cada hagiógrafo; *no fue elaborada por un solo hombre como el Libro de Mormón o el Corán; *fue escrita por más de cuarenta escribas llamados hagiógrafo.

Tanto el Libro del Mormón (por José Smith) como el Corán (por Mahoma) se apoyan en el testimonio de un solo individuo, mientras que la Biblia se apoya en el testimonio de decenas de escritores y de diversas comunidades (hebreas-judías para el A.T., y cristianas -judíos y gentiles- para el N.T.).

*Ahora bien ¿cómo esta verdad puede ser un claro testimonio de confiabilidad objetiva? Recordemos que mientras la Biblia se apoya en el testimonio de decenas de autores y de las comunidades que representan, tanto el libro del Mormón como el Corán se apoyan en un sólo y exclusivo autor, por consiguiente la fe tanto de los mormones como la de los musulmanes se sostiene en el testimonio de un único testigo, mientras que la fe en la Biblia se sostiene en decenas de testigos más el testimonio histórico de las comunidades representadas por ellos. Ahora bien ¿Cómo José Smith, fundador de los Mormones (más de 1,800 años después de la Biblia), nos puede asegurar que fue realmente inspirado por un ángel para elaborar el Libro del Mormón? Lo mismo podemos decir de Mahoma con respecto al Corán (más de 500 años después de la Biblia). (Ver como referencia  Gálatas 1, 6-10). Luego, objetivamente hablando, si el origen divino de estos dos libros (Mormón y el Corán) se apoyan en el testimonio de sus respectivos autores, ¿qué grado de confiabilidad objetiva poseen? Subjetivamente hablando para sus respectivos creyentes, mucha.


1. Confiabilidad de los Libros Sagrados (Biblia, Corán y Libro de Mormón)

En este apartado vamos a demostrar qué tan confiables son por el testimonio humano.

Escritura. ¿Quién escribió?
a. Corán > Mahoma > un único testigo
b. Libro de Mormón > José Smith > un único testigo
c. Biblia > Más de 40 autores > más de 40 testigos y las comunidades envueltas en los acontecimientos narrados en los diversos libros.

i) Como se puede observar, tanto el Libro de Mormón como el Corán se apoyan en un único testigo, cuyos seguidores los consideran profetas de Dios únicamente porque ellos (Smith y Mahoma) lo dicen; ii) e igualmente estos libros aseguran estar inspirados por Dios porque Smith y Mahoma así lo han escrito y dicho en sus respectivos libros.

i) Mientras tanto, la Biblia fue escrita por más de 40 escritores por espacio de más de mil años. Son más de cuarenta testigos que dan fe de la verdad bíblica. ii) Ninguno de ellos aseguró que sus respectivos escritos eran de inspiración divina, sólo el Pueblo  de Dios es el testigo de tal revelación y el único autorizado para confirmar el origen divino de tales Escritos.




Origen. ¿Qué vino primero?
a. Mahoma > Corán > Islam > musulmanes
b. José Smith > Libro de Mormón > mormones
c.i) Israel > Escrituras (A.T.) > judíos
c.ii) Jesucristo > Iglesia > Escrituras (N.T.) > cristianos (diversas denominaciones)

i) Como se puede observar, tanto el Libro de Mormón como el Corán fueron iniciativa de su respectivo fundador, quienes aseguraron haber sido guiados por un ángel.

El problema que tienen ambos fundadores es que, su testimonio es único y personal, y no dieron la oportunidad a otros para confirmar dichas revelaciones; por consiguiente, creer a dichos testigos es demasiado subjetivo. Desde un conocimiento humano y objetivo tales revelaciones no ofrecen seguridad ni confiabilidad. Ninguna garantía de veracidad.

ii) Al contrario, la Biblia surge como fruto de la experiencia religiosa y monoteísta de un pueblo que, en su vivencia de fe, da testimonio de una revelación divina que, por amor, se da a conocer con un mensaje de Salvación.

Sólo la Biblia, desde una perspectiva humana y objetiva, nos da seguridad y confiabilidad en lo que enseña, pues ésta se fundamenta en la experiencia, primero del Pueblo de Israel (A.T.) que anuncia la venida de un Salvador y Mesías, y luego en el testimonio de la Iglesia que él fundó, la cual escribe el Nuevo Testamento.


2. Dificultades que una persona debe resolver:

Dificultad I. Para un no creyente convertirse al Islam, tendrá que creer en el Corán como libro inspirado por Dios. Pero para creer en el Corán también tendrá que creer en su único testigo: Mahoma. He aquí el dilema, ¿quién le asegura que efectivamente Mahoma es un auténtico profeta de Dios y no un falso profeta que se aprovechó de las circunstancias históricas que estaba viviendo para imponer sus ideas? Máxime si tenemos en cuenta que Mahoma utilizó personajes de la Biblia para fundamentar y dar crédito a sus palabras, y a quienes da una misión distinta a la presentada por la Biblia, sobre todo la persona de Jesús. Veamos.


I.a) Jesús, una espada de dos filos en el libro del Corán.

Muchos han visto (incluyendome) la figura de Jesús en el Corán superior a la figura de Mahoma cosa que, de ser cierta, dejaría a Mahoma mal parado. Pero ¿cuál fue la intención real de Mahoma? veamos:

I.a) 1. El filo de la espada a favor del cristianismo.
En algunos sitios de internet podemos encontrar comparaciones entre Jesús y Mahoma hallados en el Corán como las siguientes:

De Jesús: Nace de una virgen
De Mahoma: No

De Jesús: Nunca pecó
De Mahoma: Sí era pecador

De Jesús: Es llamado mesías
De Mahoma: Sólo apóstol o profeta

De Jesús: Palabra de Dios
De Mahoma: Profeta de Dios

De Jesús: Espíritu de Dios
De Mahoma: Profeta de Dios

De Jesús: Hizo milagros
De Mahoma: No

De Jesús: Dio vida a los muertos
De Mahoma: No

De Jesús: Todavía está vivo
De Mahoma: Está muerto

De Jesús: Subió al cielo con su cuerpo
De Mahoma: Está sepultado y se conoce su tumba

De Jesús: volverá
De Mahoma: no volverá

Al parecer el Corán da mayor importancia a Jesús que a Mahoma, por lo que, según este testimonio del Corán lo lógico sería seguir a Jesús y el cristianismo por encima de Mahoma y el Islam. Pero ¿es esto lo que buscaba Mahoma al utilizar e introducir la figura de Jesús en la nueva fe? Según otros autores, NO.

I.a) 2. El filo de la espada a favor del Islam

El propósito de Mahoma al incluirlo en su nueva fe no era revelar al Jesús de los cristianos ni mucho menos reconocer en él lo que los cristianos creían y predicaban sobre él, sino todo lo contrario. Sin necesidad de eliminarlo disminuir todos los atributos que de él los cristianos predicaban, y de esta forma utilizarlo como herramienta y trampolín para fundamentar y acreditar su nueva fe. (lo mismo hicieron varios siglos antes que Mahoma los gnósticos y los seguidores de Mitra con Jesús y los Apóstoles y otros personajes. Por eso hoy, entre los enemigos del cristianismo, hay quienes aseguran que los escritos gnósticos son los verdaderos evangelios, y otros que los cristianos se apoderaron de atributos del dios Mitra y se los adjudicaron a Jesucristo; y no faltan los de nuestro tiempo que han hecho lo mismo como el espiritismo, la New Age y otros). Y así:

*“El Jesús del Corán no es un judío o un cristiano, él es un musulmán.

*»Él no es el Hijo de Dios, y decirlo es la más grande de todas las blasfemias.
*ȃl no fue crucificado.
*»No se levantó de entre los muertos.
*ȃl no es el salvador de la humanidad.
*»Y, aunque Ibrahim Hooper dice que Jesús es “uno de los grandes mensajeros de Dios”, su mensaje difiere notablemente del traído por Jesús de Nazaret.
*»El Jesús musulmán anuncia que él es un profeta enviado por Dios.
*»Que él no es Dios y nunca pretendió serlo.
*»Y que él trae “noticias de un apóstol que vendrá después de mí cuyo nombre es Mohahmed [Mahoma]” (61:6).”



Ante toda esta evidencia ¿puede de hecho ser creíble el testimonio de un sólo hombre que asegura de sí ser profeta de Dios y único testigo de lo que supuestamente le fue revelado?



Dificultad II. Para alguien que quiera convertirse al mormonismo, tendrá que creer en el libro de Mormón como libro inspirado por Dios. Pero para creer en el libro de Mormón también tendrá que creer en su único testigo: José Smith. He aquí el dilema, ¿quién le asegura que efectivamente José Smith es un auténtico profeta de Dios y no un falso profeta que se aprovechó de las circunstancias históricas que estaba viviendo para imponer sus ideas? Máxime si tenemos en cuenta que el Libro de Mormón trata de una supuesta historia que se desarrolla en tierras americanas, cuyos primeros habitantes son descendientes de israelitas a los que Dios envió.

José Smith asegura que el contenido de dicho libro es total e históricamente verdadero. Los mormones le dan incluso más valor a este libro que a la misma Biblia, pero según las investigaciones realizadas (arqueológica, lingüística y, lo más reciente, la genética) han desbaratado y destruido toda pretensión de verdad en el Libro de Mormón.


Ya algunos autores han dado a conocer lo fantasioso que es el libro. A continuación te doy algunos datos de interés que te ayudarán a llegar a una conclusión:

El libro del Mormón al descubierto


Aunque los Mormones reconocen la Biblia como libro inspirado, prestan mayor atención y credibilidad al Libro que, según Joseph Smith, un ángel le dio a conocer y propagar como verdad revelada. ¿Es el Libro del Mormón un libro confiable?

A continuación te doy algunos datos, luego podrás sacar tu conclusión.

1.  «Esta obra es una miscelánea (mezcla de unas cosas con otras)».

2.  «Trata sobre las crónicas de un pueblo formado por unas supuestas tribus perdidas de Israel, que llegaron a América en dos ocasiones distintas. Una a raíz de la dispersión después de la Torre de Babel y otra unos seiscientos años a. de C. Todo ello mezclado con pasajes bíblicos».

3. Mientras la arqueología ha confirmado la veracidad de los Evangelios, haciendo de ellos fuentes históricas confiables, para el Libro del Mormón ha sido totalmente desastroso. Escuchemos a algunos autores como John Ankerberg y John Weldon al respecto: «Es decir, nunca se localizó ninguna ciudad del Libro del Mormón, nunca se encontró ninguna persona, lugar, país o nombre del Libro del Mormón, ningún artefacto del Libro del Mormón, ni las escrituras del Libro del Mormón, ninguna inscripción del Libro del Mormón... jamás se encontró nada que demuestre que el Libro del Mormón no es más que un mito o una invención.»

Errores y anacronismos contenidos en el Libro

1. «Hay quien ha encontrado en el Libro de Mormón citas de Shakespeare (Bousquet. "Les Mormons", pág. 14)».

2.  «Las alusiones al caballo, desconocido en América hasta su descubrimiento y conquista por los españoles, son frecuentísimas (1Nefi 18, 25; Enós 1, 21; Alma 18.10-12; Nefi 3, 22; 3Nefi 4, 4; Eter 9, 19)».

3. «Es curioso también que los nefitas (una de las tribus que se alojaron en América) comenzaran a contar la era cristiana desde el año 9 después de Cristo (3Nefi 2, 8), siendo así que los cristianos no comenzaron a contarla hasta el siglo VI en Italia, el VIII en Francia y el XII en España; y aun así con el error de origen debido al equivocado cómputo de Dionisio el Exiguo, en unos seis años».

4. «Se ha citado también como error el empleo de la cimitarra -desconocida como arma por los judíos y sólo empleada por los árabes--, citada varias veces como arma usual en el Libro de Mormón (Enós 1, 20; Alma 44, 8)».

5.  «Es verdaderamente curioso que en las costas del Mar Rojo desembocaran ríos inmensos y fuera el país de la Abundancia por sus frutos (1Nefi 2, 8 y 17, 6).»

6. «No deja de ser inverosímil que un libro tan extenso, pues tiene unas 275,000 palabras, estuviese contenido en unas pocas planchas, gruesas como la hojalata formando un volumen de  unas seis pulgadas de espesor y no mucha longitud y anchura, pues que Smith lo manejó con facilidad para ocultarlo y aun para llevarlo algunas veces sobre sí».

7. «La geografía del Libro es desconcertante. Se cita de nuevo un país de la Abundancia en América y por contraste otro de la Desolación; unos límites imposibles de localizar en la actualidad y unas distancias inverosímiles».

Toda esta documentación (y muchas más) nos sirve de testimonio y evidencia para desenmascarar y dar a conocer las mentiras y falsedades de los Mormones.  Y si esto no es suficiente, mira esto otro.


Y ¿cómo José Smith logra pasar como verdad, ante sus seguidores, el contenido de tal libro? De la misma manera que hizo Mahoma con los suyos, presentándose como elegido de Dios para revelar unas verdades por tanto tiempo ocultas; verdades que le fueron reveladas por un ángel (como el caso de Mahoma); y para contraponerlo al cristianismo asegurar que los Apóstoles de Jesús distorsionaron la verdad revelada por Cristo (del mismo modo que hizo Mahoma con la Biblia para poder imponer sus enseñanzas como las verdaderas al asegurar que los escritos bíblicos habían sido alterados y distorsionados), por lo que Jesús tuvo que venir a tierras americanas para revelar su mensaje a los descendientes de israelitas ahí establecidos.

Luego, lo mismo que afirmo de Mahoma, ante toda esta evidencia ¿puede de hecho ser creíble el testimonio de un sólo hombre que asegura de sí ser profeta de Dios y único testigo de lo que supuestamente le fue revelado?



Dificultad III. Pero ¿si es uno que quiere hacerse cristiano? Uno que desee hacerse cristiano protestante, tendrá que creer en la Biblia como libro inspirado por Dios. Pero para creer en la Biblia como libro inspirado por Dios, también tiene que creer en... ¿la misma Biblia como su propia autora y única autoridad? He aquí los siguientes dilemas: a. ¿Dónde la Biblia dice que ella es la única autoridad? (Respuesta católica: Mateo 18, 15-18; Lucas 10, 16; Hebreos 13, 17; 1 Tesalonicenses 5, 12; Hechos 20,28-29). b. ¿Dónde la Biblia dice que sólo en ella está contenida la plenitud de la verdad? (Respuesta católica: 1Timoteo 3,15; Efesios 3,8-11). c. ¿Dónde la Biblia enseña que se puede interpretar libremente sin ninguna autoridad externa a ella? (Respuesta católica: 2 Pedro 1,20; 3,15-16). d. ¿Dónde la Biblia dice que en ella está contenida la totalidad de lo que Dios ha revelado? (Respuesta católica: Juan 21,15; Juan 14,25-26; Juan 16,12-13; 2 Tesalonicenses 2,15). e. ¿Dónde la Biblia posee una lista oficial de los libros que forman la totalidad del canon bíblico? (La lista de los libros que componen la Biblia nos ha llegado por tradición, la cual fue oficialmente establecida por la Iglesia Católica en varios sínodos: Roma 382, Nipona 393, Cartago 397 y otros). Ahora bien, para creer en estos dilemas, hay que creer en el primero que los propuso: Martín Lutero. He aquí el dilema, ¿quién asegura que efectivamente Martín Lutero es un auténtico profeta de Dios y no un falso profeta que se aprovechó de las circunstancias históricas que estaba viviendo para imponer sus ideas? Máxime si vemos que la inmensa mayoría de protestantes no pertenecen a la Iglesia que él fundó, demostrando así que no creen en él.

Dificultad IV. Uno que quiera ser cristiano católico convencido y practicante, deberá creer en la Iglesia como una institución divinamente establecida por Dios, cuya misión es dar a conocer la verdad total (envío apostólico de anunciar el Evangelio a todos los pueblos todos los días hasta el fin del mundo -Mateo 28,18-20; Efesios 3,8-11; 2 Timoteo 2, 2). Pero para creer en esta realidad, también deberá creer en su origen apostólico, es decir, que históricamente se remonta hasta los Apóstoles y de los Apóstoles con Jesucristo, su fundador (Mateo 16,18; Hechos 20,28; Mateo 28,20). Pero para creer en estas realidades, también deberá creer en la verdad histórica del Nuevo Testamento (como fuentes históricas) y la Tradición Apostólica (Escritura y Tradición: 2 Tesalonicenses 2,15; 2 Timoteo 2,2) que dan testimonio de la verdad histórica de Jesucristo; verdad ésta que queda confirmada por el testimonio de los Apóstoles y de la primera comunidad cristiana, testigos oculares de los hechos narrados en los Evangelios. Por consiguiente, nuestra fe católica en la Biblia como palabra de Dios, adentra sus raíces hasta los mismos Apóstoles del Cordero y sus discípulos, algunos de ellos redactaron los escritos del Nuevo Testamento. Es así que, los protestantes amparan (aunque no lo vean así, y si lo ven no lo van a aceptar) su fe en la Biblia por y gracias a la Iglesia Católica.



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