ESTUDIO BIBLICO SOBRE LA VERDADERA Y ÚNICA IGLESIA DE JESUCRISTO - TÓPICO III

Por Gerardo Cartagena Crespo

La unidad de la Iglesia, tal y como está definida y establecida en la Biblia, evitará la división, la anarquía y el relativismo de la fe, división que podemos ver en el protestantismo y la división de las iglesias ortodoxas


Tópico III

Unidad y jerarquía de la única y verdadera Iglesia de Jesucristo, signos infalibles que la identifican y la señalan.

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NOTA. Importante tener Biblia en mano para búsqueda y estudio de los textos. Para que puedas entender lo que aquí se dice y se afirma, es importante buscar y leer los textos bíblicos. Se hace así para estimular el uso de la Biblia. Si no tienes una Biblia a manos copia el texto y utiliza el buscador, por ejemplo el de Google.

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Tema Primero
La unidad de la verdadera y única Iglesia de Jesucristo

Jesús fundó su Iglesia, una sola y única Iglesia cuya unidad es signo y garantía de que, el mensaje de la salvación y el depósito de la verdad mantendrán su integridad a pesar de las debilidades humanas.

La unidad de la Iglesia que Cristo fundó es un signo que indica y señala cómo es y cuál es la Iglesia hoy. Así pues, veamos y busquemos si hay en la Biblia textos que, como argumentos convincentes y convergentes, apoyen esta afirmación.

Este tema de la unidad es capital para establecer la verdadera Iglesia de Cristo la cual es una y única.

*¿Qué tipo de unidad es la que describe la Biblia para la Iglesia? ¿unidad absoluta o unidad relativa? (para la definición de unidad te refiero al tópico I). Analiza cuidadosamente los textos bíblicos para que puedas llegar a un juicio acertado ya que, la respuesta correcta y exacta a estas interrogantes son clave en la identificación de la Iglesia de Jesucristo.

Argumento I: La unidad de la Iglesia es un deseo expresado por Jesucristo, no una utopía.


Los siguientes textos bíblicos nos muestran la imposibilidad de que la Iglesia que Cristo fundó, Su único Cuerpo, estuviese dividido en una gran cantidad de congregaciones independientes al estilo protestante. Este modo de visualizar y concebir a la Iglesia de Cristo es total y absolutamente anti-bíblico. Y ¿cuál es el argumento protestante?, la Iglesia de Cristo es invisible, otra doctrina de hombres que NO está en la Biblia.

A. Una sola y única Iglesia

1. "Mí Iglesia" Mateo 16,18

2. "La Iglesia del Señor" Hechos 20,28

3. "Su Pueblo" 1Pedro 2,9-10

Todas las veces que el Nuevo Testamento menciona a la Iglesia se refiere a ella como una unidad en un solo y único cuerpo. El problema de muchos protestantes es que, la idea de la división la tienen tan adentro que la trasladan a la Biblia y, por consiguiente, a la Iglesia Primitiva y se creen que, de igual manera ésta se componía de innumerables iglesias independientes, como si el Espíritu Santo fuese un espíritu de división y confusión, en contra de la naturaleza divina de que Dios es Dios de orden y de paz; la división es contraria a el orden y la paz.

B. El único rebaño de Cristo

*Juan 10,16: "También tengo otras ovejas, que no son de este redil; también a ésas las tengo que conducir y escucharán mi voz; y habrá un solo rebaño, un solo pastor."

Aquí Jesús indica que posee un solo y único renaño al cual deberían o deben entrar todos aquellos que se dicen ser sus fieles discípulos para conformar uno solo. Esta manifestación directa de Jesús nos da a entender que la división es totalmente opuesta a Su voluntad.

C. La unidad querida por Jesucristo

*Juan 17,20-23: "No ruego sólo por éstos, sino también por aquellos que, por medio de su palabra, creerán en mí, para que todos sean uno. Como tú, Padre, en mí y yo en ti, que ellos también sean uno en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado. Yo les he dado la gloria que tú me diste, para que sean uno como nosotros somos uno: yo en ellos y tú en mí, para que sean perfectamente uno, y el mundo conozca que tú me has enviado y que los has amado a ellos como me has amado a mí."

Si el deseo y, por ello, el envió divino de que el mensaje de la salvación y la verdad llegue a todos los pueblos en todo el mundo, es de sentido común creer que, siendo Dios un Dios de orden y paz, este mensaje debería o debe llegar íntegro y claro para que Su dueño, Jesucristo, sea reconocido en todo el mundo. El hecho de que Jesús insista en una forma de unidad tal "que el mundo crea que tú me has enviado", es porque esa unidad tiene que ser visible para que el mundo pueda ver; y ¿cuál iglesia posee hoy el signo bíblico de unidad: protestantismo, ortodoxos o catolicismo? Es así que Dios se encargará, a pesar de los desordenes provocados por los seres humanos, de que haya una institución (la Iglesia que Cristo fundó) capaz de, en su unidad que la hace visible ante el mundo, presentar ante las naciones el mensaje íntegro de Jesucristo. De que se la quiera y se la pueda ver dependerá de muchos factores.

Este texto nos muestra el deseo de Jesucristo, que los miembros de su rebaño, es decir la Iglesia, deben conformar una unidad no accidental, sino absoluta: un solo rebaño, un solo pastor. Ahora ¿en qué consiste dicha unidad? ¿cómo es descrita y definida en la Biblia? Los siguientes textos nos dejarán ver si la unidad deseada por Cristo y establecida por el Espíritu Santo es según los protestantes, los ortodoxos o según la Iglesia Católica.

Preguntas de reflexión:
*La unidad que Cristo pide al Padre que se dé en sus seguidores, ¿es substancial o accidental? Es decir, absoluta o relativa. (Para la definición de unidad te refiero al tópico I).
*¿Por qué y para qué es tan importante que se dé la unidad de todos los creyentes en Cristo?
*El mundo ¿cree hoy en Jesucristo? ¿por qué?

Ahora bien, ¿cómo podemos saber que esa Iglesia existe hoy después de casi veinte siglos? Entre otras notas o signos que la identifican, el de la unidad es una luz inconfundible de la seriedad con la que Dios nos ha entregado, en Jesucristo, su mensaje de salvación y verdad.

Argumento II: Es un deseo expresado por Dios de que haya unidad de CUERPO en su Iglesia.

Para los protestantes poder justificar la división causada en el protestantismo, dicen que la unidad es meramente espiritual, pero ¿eso es lo que enseña la Biblia? Lee cuidadosamente los textos y, según el contexto, indica el tipo de unidad manifestado y querido por Dios.

a. 1Corintios 12, 12-13: "Pues del mismo modo que el cuerpo es uno, aunque tiene muchos miembros, y todos los miembros del cuerpo, no obstante su pluralidad, no forman más que un solo cuerpo, así también Cristo. Porque en un solo Espíritu hemos sido todos bautizados, para no formar más que un cuerpo, judíos y griegos, esclavos y libres. Y todos hemos bebido de un solo Espíritu."

Un solo cuerpo en el que Cristo es la cabeza y la manera como está descrito y definido no da lugar a divisiones (congregaciones aisladas e independientes), sino así como el cuerpo es uno, así también la Iglesia que Cristo fundó.

El hecho de que hemos sido "bautizados en un solo Espíritu" imposibilita la existencia de grupos independientes, aunque digan creer en el mismo Cristo. Podrá cada grupo o congregación asegurar seguir a Jesucristo, pero el hecho innegable de estar divididos es signo de que las diversas interpretaciones bíblicas, en algunos puntos (y algunos fundamentales, por eso están y se mantendrán divididos), difieren unos de otros; luego no hay unidad conforme a la doctrina de la Sagrada Escritura. Los siguientes textos expresan la misma idea de cómo es la unidad de la Iglesia como Cuerpo de Cristo. 

b. 1Pedro 2, 3-5

c. Efesios 1, 22-23

d. Efesios 2, 17-22

e. 1Corintios 10, 15-17

Preguntas de reflexión:

*¿A qué cuerpo el apóstol alude aquí que es el cuerpo de Cristo
*¿Quiénes componen ese cuerpo?
*¿Cómo se va construyendo ese cuerpo?
*¿Por qué un único cuerpo y no más?

Palabras claves: «un solo cuerpo, así también Cristo.»

Argumento III: Es un deseo expresado por Dios de que haya unidad de APOSTOLADO en su Iglesia.

a. Romanos 12, 4-8: "Pues, así como nuestro cuerpo, en su unidad, posee muchos miembros, y no desempeñan todos los miembros la misma función, así también nosotros, siendo muchos, no formamos más que un solo cuerpo en Cristo, siendo cada uno por su parte los unos miembros de los otros. Pero teniendo dones diferentes, según la gracia que nos ha sido dada, si es el don de profecía, ejerzámoslo en la medida de nuestra fe; si es el ministerio, en el ministerio; la enseñanza, enseñando; la exhortación, exhortando. El que da, con sencillez; el que preside, con solicitud; el que ejerce la misericordia, con jovialidad."

Es interesante cómo es definida y descrita la Iglesia fundada por Jesucristo. Aquí se habla de una unidad ministerial, no de muchas iglesias con diversos ministerios, sino un solo y único Cuerpo de Cristo cuyos miembros ejercen diversos ministerios pero conservando la unidad querida por Dios. De igual manera los textos que siguen a continuación expresan la misma idea (importante leer dichos textos).

b. 1Corintios 12, 4-11

c. 1Corintios 12, 28-31

d. Efesios 4, 11-16

Como podemos observar el ejercicio de los diversos ministerios se dan en la unidad de la Iglesia, indicando con ello la imposibilidad de que ésta la conformen grupos aislados e independientes (al estilo protestante), y mucho menos que sea invisible. La organización de los diversos ministerios, tal y como están descritos y definidos, hacen de la Iglesia que Cristo fundó una institución organizada y ordenada a un fin: la evangelización del mundo. Y esto sólo es posible gracias a una Iglesia visiblemente organizada con una jerarquía que asegure su unidad.

Argumento IV: Es un deseo expresado por Dios de que haya unidad de DOCTRINA en su Iglesia.

Pero el signo que mejor y mayor claridad define e identifica cómo es y en qué consiste la unidad de la Iglesia, es su unidad doctrinal.

a. Efesios 4, 3-6.13-16: "...poniendo empeño en conservar la unidad del Espíritu con el vínculo de la paz. Un solo Cuerpo y un solo Espíritu, como una es la esperanza a que habéis sido llamados. Un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo, un solo Dios y Padre de todos, que está sobre todos, por todos y en todos... hasta que lleguemos todos a la unidad de la fe y del conocimiento pleno del Hijo de Dios, al estado de hombre perfecto, a la madurez de la plenitud de Cristo. Para que no seamos ya niños, llevados a la deriva y zarandeados por cualquier viento de doctrina, a merced de la malicia humana y de la astucia que conduce engañosamente al error,..."

Aquí el Espíritu Santo por boca de San Pablo nos revela que la verdadera y única Iglesia de Jesucristo es aquella que mantiene la unidad de doctrina. Este signo destruye la teoría de una iglesia invisible, pues esta teoría puramente humana dice que, la iglesia de Jesucristo la conforman todos los creyentes en Cristo independientemente de la congregación a la que se pertenezca e independientemente de las interpretaciones que se le dé a la Biblia. Estas contradicciones doctrinales en el protestantismo es un signo de que la Iglesia invisible es una falacia para excusar el origen humano del protestantismo y sus afiliados. Como vemos esta teoría de muchos no católicos es totalmente contradictoria a la enseñanza bíblica de la unidad.

Importante buscar y leer...

b. Gálatas 1, 6-9

Así como la división, tal y como la apoya y fomenta el protestantismos, es contraria a la Biblia... la unidad doctrinal tal y como está descrita y definida en la Biblia y practicada y defendida por la Iglesia Católica, es signo innegable de una sola y única Iglesia que es visible, para que dicha verdad pueda ser identificada por quienes sinceramente la buscan.

Preguntas de reflexión:
*Qué significa: «Uno es el Señor, una la fe, uno el bautismo. Uno es Dios.»
*Qué significa: «La meta es que todos juntos nos encontremos unidos en la misma fe y en el mismo conocimiento del Hijo de Dios.»
*¿Cumple la totalidad del cristianismo con esta verdad bíblica? ¿por qué?
*Entonces, si el cristianismo como está hoy constituido no cumple con esta verdad bíblica, ¿ello es signo de que fracasó?
*Por consiguiente, el cristianismo, tal y como está constituido hoy, ¿es obra de Dios o de los hombres?
*Luego ¿es el cristianismo el encargado de proclamar el Evangelio de Jesucristo en toda su integridad? o dentro del cristianismo ¿podemos identificar y señalar la Iglesia que Cristo fundó y diferenciarla del resto como la única autorizada para proclamar dicho Evangelio?

Argumento V: Si la Iglesia es el Cuerpo de Cristo, Cristo es la cabeza de la Iglesia.

a. 1Corintios 10, 16-17

b. 1Corintios 12, 27

c. Efesios 1, 22-23

d. Colosenses 1, 18: "Él es también la Cabeza del Cuerpo, de la Iglesia: Él es el Principio, el Primogénito de entre los muertos, para que sea él el primero en todo,..."

Así como Cristo es uno, uno es su cuerpo, por consiguiente una es la Iglesia. Y esa unidad para que esté acorde con la Biblia debe ser una unidad de cuerpo (una sola y única congregación), unidad de apostolado o ministerio (dentro de esa única congragación) y unidad de fe (de un mismo y único credo dentro de esa única congregación).

Claro los protestantes se escudarán tras la doctrina de la iglesia invisible, pero ¿dónde está esa enseñanza en la Biblia? Teorías de hombres, nada más.

Si Jesucristo es la Cabeza de la Iglesia, ésta es su único Cuerpo. No dos ni tres, ni mil ni cincuenta mil. Todas las que han surgido después de Cristo, son miembros mutilados del Cuerpo de Cristo del cual se han separado.

Pero sucede que muchos no darán su brazo a torcer y se adjudicarán esta unidad como signo propio de su respectiva iglesia. Pero ¿cómo argumentar que este signo bíblico de unidad es propio y exclusivo de la única y verdadera Iglesia que Cristo fundo? La evidencia bíblica presentada hasta ahora ya nos indica cual es esa Iglesia. Y si lo hasta aquí expuesto no es suficiente, todavía hay más...


Argumento VI: Los cuatro pilares o columnas que confirman la unidad absoluta de la Iglesia de Jesucristo: Hechos 2, 42.

El texto de Hechos nos presenta los siguientes signos propios de la Iglesia que Cristo fundó:

a. Participación en la vida común (unidad).

Esta columna queda fortalecida con las siguientes columnas o pilares.

b. Se reunían frecuentemente para escuchar la enseñanza de los apóstoles (formación, catequesis bajo el liderazgo apostólico).

c. En las oraciones (culto).

d. En la fracción del pan (Eucaristía).

Estos cuatro pilares los podemos hallar de modo claro y tangible en la Iglesia Católica desde la Iglesia Primitiva y Apostólica.

Ahora bien ¿cómo sabemos que esta unidad descrita y definida en la Biblia es propia y exclusiva de la Iglesia Católica Apostólica Romana? La siguiente evidencia nos lo hará saber.

Unidad de espacio y tiempo

Sólo aquella iglesia que demuestre poseer estas dos notas, signos o cualidades, puede considerarse como la única y verdadera Iglesia que Cristo fundó.


Argumento VII: La unidad de la Iglesia es una unidad universal de espacio o lugar.

Esta unidad de la Iglesia no se limita a un lugar limitado, sino que, según las promesas de Cristo, es extensiva al espacio universo: («Vayan y anuncien la Buena Nueva por todo el mundo a toda la creación hasta el último rincón de la tierra» -Mateo 28, 18-19; Marcos 16, 15; Hechos 1, 6-8-).

Estos textos nos dejan ver que, más que un deseo y un simple pedido, estamos ante un mandato de Cristo-Dios por el que la Iglesia está, a parte de llamada, obligada a anunciar y propagar el mensaje de salvación y verdad a todos los pueblos en todos los países del mundo entero. Estamos ante una Iglesia que debe y tiene que ser universal, para todo el mundo, y esta propagación tiene que darse desde el principio, aunque tomase lo que ha tomado hasta ahora: veinte siglos.

Luego la verdadera y única Iglesia de Cristo es aquella que ha recibido el envío desde y por el mismo Jesucristo, NO antes NI después.

Por consiguiente, la Iglesia no es un conglomerado de iglesias independientes al estilo protestante. La descripción que da la Biblia sobre la unidad de la Iglesia no da margen a la división.

Argumento VIII: La unidad de la Iglesia es una unidad universal de tiempo.

Si la presencia de Cristo en su Iglesia se dará en todas las épocas de la historia desde su ascención hasta su segunda venida (Mateo 28, 20), esta promesa de Cristo es signo de que, si él va a estar con su Iglesia siempre, su deseo de "un solo rebaño bajo un solo pastor" (Juan 10,16) se va a cumplir infaliblemente. Por eso la Biblia nos advierte insistentemente contra los falsos profetas y contra las divisiones.

Luego que Jesús da el mandato a la Iglesia, representada en los apóstoles y discípulos, les promete que estará con ellos siempre (Mateo 28, 20); que jamás, pero jamás los abandonará. Presencia divina en Su Iglesia hasta el fin del mundo.

Luego no puede ser que, por las debilidades humanas y con tan poderosa promesa, resulte que ahora Cristo haya abandonado su Iglesia. Aquel que invitó a los acusadores a lanzar la primera piedra contra la adúltera, se muestre ahora inmisericorde con su propio Cuerpo místico, su Esposa amada por la que derramó su sangre. Este pensamiento de abandono y desprecio es propio de los enemigos de Cristo que le gustarían verlo fracasar en su Obra de Salvación.


Argumento IX: ¿Cuál iglesia es la que refleja esta unidad de espacio y tiempo?

Aquí entramos en la identificación concreta de cuál es, en nuestro tiempo actual, la verdadera y única Iglesia de Cristo, la que él fundó hacen veinte siglos; veinte siglos de historia de la Iglesia.

En el tópico anterior vimos, desde la Biblia, que sólo puede ser la única y verdadera Iglesia de Cristo la que él fundó hacen veinte siglos en la Cruz en el Monte Calvario, y la que él envió por todo el mundo, a todas las naciones para anunciar y dar a conocer a todos los pueblos el mensaje de Dios que, no es otra cosa que el de la salvación y verdad. Por consiguiente, las que han surgido después, NO son de Cristo ni mucho menos poseen el encargo de anunciar dicho mensaje, sino inventos de los hombres.

Esta verdad bíblica nos da la clave para ver y señalar cómo debe ser la unidad en la Iglesia de Jesucristo. Aunque la Iglesia se componga de muchos miembros, todos deben estar unidos como los miembros del cuerpo que, aunque muchos, todos forman un solo ser.

El protestantismo carece de esa unidad que enseña la Biblia. Aunque se unan en concilios y cosas semejantes, doctrinal, moral y espiritualmente están divididos. Los ortodoxos, aunque mantienen cierta unidad doctrinal, existe división al mantener y fomentar las iglesia regionales. No hay unidad de cuerpo.

Sólo la Iglesia Católica Apostólica y Romana posee en sí misma tal unidad de doctrina, moral y espiritualidad, tanto en el tiempo como el espacio, que a pesar de sus múltiples e incontables grupos, movimientos, asociaciones, ordenes religiosas… todos ellos se mantienen unidos bajo la tutela de la Iglesia, y ello debido a que "hemos sido bautizados en un mismo Espíritu, para formar un único cuerpo. Y a todos se nos ha dado a beber del único Espíritu" (1Corintios 12, 12-13).

El siguiente testimonio de Scott Hahn nos deja ver y entender la realidad en las iglesias ortodoxas...

"Volví a casa, buscando y pidiendo la ayuda de Dios. Seguí esperando poder encontrar algún defecto grave que me disuadiera de «lanzarme al Tíber» y convertirme en «papista», como solíamos decir.

Empecé, pues, a buscar entre los ortodoxos. Hice cita con Peter Gilquist, un evangélico convertido a la Iglesia Ortodoxa de Antioquia, para saber por qué él había preferido la Ortodoxia a Roma. Sus razones reforzaron mi impresión de que el protestantismo estaba equivocado; pero al mismo tiempo encontré la defensa de la Ortodoxia contra Roma insatisfactoria y superficial. Después de haberla estudiado profundamente, encontré que las diversas iglesias ortodoxas estaban irremediablemente divididas entre sí, en forma similar a los protestantes, con la diferencia que los ortodoxos estaban divididos a base de nacionalismos étnicos: había grupos ortodoxos que se llamaban a sí mismos griegos, rusos, rutenios, rumanos, búlgaros, húngaros, serbios, etc. Han coexistido por siglos, pero más como una familia de hermanos que han perdido a su Padre.

Un estudio proseguido me llevó a la conclusión que los ortodoxos tienen una maravillosa liturgia y tradición, pero se han quedado estancados en cuanto a la teología. Llegué a estar convencido además de que estaban doctrinalmente equivocados por haber rechazado algunas enseñanzas de la Escritura y de la Iglesia católica, especialmente la cláusula filioque («y del Hijo») que fue añadida al Credo del Concilio de Nicea. Por otro lado, su rechazo al Papa como cabeza de la Iglesia parecía basarse más en política imperial que en sólidas bases teológicas. Esto me ayudó a entender por qué, a través de su historia, los ortodoxos tienden a exaltar más la figura del emperador y del estado que la del obispo y la Iglesia (lo que es también conocido como «cesaropapismo»). Se me vino a la mente que Rusia ha estado cosechando las consecuencias de este enfoque ortodoxo a lo largo del siglo XX" ("Roma Dulce Hogar", pág. 63).

Conclusión. El deseo explícito de Cristo para que sus seguidores sean uno en esencia, como el Padre y él son uno por naturaleza; y el Espíritu Santo por boca de los Apóstoles de que la Iglesia sea una, así como el cuerpo es uno a pesar de que tiene muchos miembros, es prueba de que Dios quiere, a parte de una sola Iglesia, que ésta esté unida en cuerpo, apostolado y doctrina. Luego la unidad de la Iglesia de Cristo es un argumento convincente con el que podemos identificar cuál es la verdadera Iglesia de Jesucristo, y un signo que la distingue y señal de la presencia de Dios, por ser Dios de orden y de verdad, en medio de ella.

Preguntas de reflexión:
*¿En qué consiste la unidad de cuerpo?

*¿En qué consiste la unidad de apostolado?
*¿En qué consiste la unidad de doctrina?
*¿En qué consiste la unidad universal de espacio y tiempo?
*¿Cómo este sentido de unidad se ajusta al deseo divino de la salvación universal del género humano? 
*¿Cómo este sentido de unidad ayuda a la Verdad Revelada?
*Este sentido de unidad, ¿está conforme con el orden y la paz?
*Entonces, ¿cómo contrasta esta verdad bíblica de la unidad con la multitud de iglesias y sectas que constituyen el cristianismo actual?
*¿Qué institución religiosa se ajusta a esta definición bíblica de unidad?: Protestantismo; Ortodoxa; Católica. (Explica y comenta el sentido de unidad de cada uno de ellos, y cuál de ellas se ajusta al sentido de unidad que es descrito en la Biblia.)

Tanto el protestantismo como la ortodoxia están irremediablemente divididos, sólo la Iglesia Católica mantiene la unidad de cuerpo, apostolado y doctrina tanto en espacio (en todas partes) como en tiempo (desde que Cristo la fundó).

*-*Justificación: Dicen los protestantes, para justificar el origen humano (no divino) del protestantismo, que esta Iglesia descrita en la Biblia, durante los primeros tres siglos se mantuvo, más o menos pura, en la verdad del Evangelio, pero luego se corrompió, adulteró la doctrina y se apartó de la verdad; dejó de ser la Iglesia de Cristo.

Esta teoría protestante ha ido evolucionando de la siguiente manera:

1. La Iglesia primitiva es la Iglesia católica que se corrompe y se aparta de la verdad;

2. de la Iglesia Primitiva, al corromperse sale, surge, se origina la Iglesia católica;

3. la Iglesia católica fue fundada por el Emperador Constantino.

4. Las últimas interpretaciones están señalando que, el hecho de que los Padres Apostólicos (discípulos directos de los Apóstoles) y Santos Padres ya enseñaban doctrinas afines con la Iglesia Católica, es indicio de que la Iglesia Primitiva estaba en un proceso de adulteración de la sana doctrina. Esta teoría protestante es de las más recientes; recién salida del horno satánico de las enseñanzas de hombres con la que pretenden justificar el origen humano (NO divino) del protestantismo y grupos afines.

Como hemos visto en el tópico anterior, estas afirmaciones carecen de pruebas bíblicas e históricas y, en cierto punto, son una blasfemia contra el Espíritu Santo.

Ante la pregunta "¿Cuál es la verdadera y única Iglesia de Jesucristo?", la respuesta acertada desde la Biblia sería: La que Cristo fundó hacen 20 siglos, a la cual se ingresa por medio del Bautismo (Romanos 6,2-5), bautismo por el que somos salvos por la resurrección de Jesucristo (1Pedro 3,21); bautismo por el que somos perdonados de nuestros pecados (Hechos 2,37-38) e injertados al único cuerpo de Cristo que es su Iglesia; Iglesia llamada a construir el "edificio espiritual" de la salvación y la verdad.

Estas verdades bíblicas destruyen las teorías de los no católicos para justificar el origen humano de sus respectivas congregaciones y creencias, tales como el que la Iglesia de Cristo es invisible, que la Iglesia de Cristo fue escondida para luego resurgir en estos últimos tiempos...

Y estas verdades bíblicas nos dejan saber que las "iglesias", sectas y demás grupos auto-llamados cristianos que han sido fundados en fechas posteriores a Cristo, NO pueden ser la Iglesia de Cristo, sencillamente porque Él no la fundó. Así quedan eliminadas casi la totalidad de ellas a excepción de la Católica Apostólica Romana y las Ortodoxas, a las que se les reconoce su origen apostólico, por haber sido una con la Iglesia Católica antes del cisma.

Nota. La Iglesia Ortodoxa, antes del cisma de 1054, era una con la Iglesia Católica. El problema surge cuando, después de Constantino I, el Imperio Romano se divide en dos (Oriente y Occidente) propiciando con ello que, a lo largo de varios siglos también ambas regiones geográficas de la Iglesia se fueran alejando en sus relaciones. Para entender el origen de este cisma, veamos algo de historia.

El cisma de Oriente y el origen de las iglesias ortodoxas

"Es necesario que yo piense en la Iglesia Católica, extendida de oriente a occidente". Palabras estas del Obispo Fructuoso, mártir durante la persecución del emperador Valeriano entre el 257-260. Testimonio muy significativo que corrobora el pensamiento general cristiano de la unidad, de Oriente y Occidente, como una sola y única Iglesia de Cristo.

Con las sectas y herejías de los primeros mil años de la Historia de la Iglesia que Cristo fundó, la Iglesia sufrió muchas traiciones y heridas de escándalos, herejías y sectas, algunas superficiales pero otras tan profundas (como el arrianismo) que pareciera estar a punto de zozobrar, como una barca empujada por las tormentas pero, por el poder del Espíritu Santo, siempre saliendo airosa y vencedora contra los vientos huracanados del mal.

Una de esas terribles tormentas lo fue el cisma de oriente por el que la parte de la Iglesia Católica oriental se separaba de la Iglesia Católica occidental. (Hay que aclarar que existen muchas iglesias orientales con rito propio que han vuelto o se han mantenido en comunión con la Iglesia Católica y al Papa).

Se pudiera decir que el germen de la separación comenzó cuando el Imperio Romano, después de Constantino, se divide en dos por la parte política y geográfica (división que contribuyó mucho al alejamiento y separación entre la Iglesia en Occidente con su parte Oriental), y por la parte de la fe con el credo Nicenoconstantinopolitano.

En este credo, específicamente en la fórmula: “Creemos en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo", fue uno de los argumentos que a la postre desembocó en el cisma. ("Y del Hijo"-filioque). Esta fórmula (que es fundamento de la fe trinitaria) mientras es adoptada por la Iglesia occidental, los orientales se mantienen con la fórmula: “que procede del Padre por el Hijo.” Al parecer no hay mucha diferencia, pero desde el punto de vista teológico sí existe una infinita diferencia. No es lo mismo que algo proceda «a través de  o  por medio de» (entendiéndose como una mediación), que proceda directamente «desde  o  del». No es lo mismo que el Sol ilumine la Tierra por medio de la Luna, a que sea iluminada directamente del Sol. Y así, si el Espíritu Santo es el Amor del Padre hacia el Hijo (siendo que el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo son consubstanciales, es decir, de la misma y única naturaleza divina indivisible e infinitamente simple), el Amor del Hijo hacia el Padre, por la misma naturaleza indivisible y simple, tiene que proceder del Hijo hacia el Padre y no del Padre por el Hijo.

Esta diferencia en la teología trinitaria oriental y occidental, aunque mantuvo ciertas aspereza, no representó para la Iglesia una separación material y formal. La separación entre Oriente y Occidente se hizo más patente cuando “en el año de 858 el patriarca de Constantinopla, Ignacio, fue depuesto a consecuencia de intrigas cortesanas; en su lugar el gobierno nombró a Focio, un hombre de grandes méritos científicos que hasta entonces había sido seglar. Ignacio acudió al papa Nicolás I (858- 867), el cual declaró ilegítima la elección de Focio. Éste, por su parte, reunió un sínodo que declaró depuesto al papa (867)... Y bajo ningún concepto reconocía el primado del obispo de Roma... Nadie, ni arriba ni abajo, tenía aún la impresión de encontrarse en un estado de cisma. Puede decirse, sin embargo, que a partir de Focio la escisión se consumó, si no formalmente, cuando menos materialmente” (“Historia de la Iglesia”, Ludwig Hertling, Biblioteca Herder, pág. 162).

No fue hasta el año de 1053 que, “el patriarca de Constantinopla Miguel Cerulario... ordenó el cierre de todas las iglesias y monasterios latinos de Constantinopla, y difundió sañudas acusaciones contra toda la iglesia occidental. León IX envió una delegación a Bizancio... El emperador los acogió amistosamente, pero el patriarca les negó la comunión. En vista de ello, depositaron una bula de excomunión sobre el altar de Santa Sofía (16 de julio de 1054) y emprendieron el regreso”  (“Historia de la Iglesia”, Ludwig Hertling, Biblioteca Herder, pág. 184).

Es desde esta fecha (1054) que da inicio de modo oficial el cisma.
A  pesar de varios intentos de unificar nuevamente la Iglesia, dichos intentos fueron infructuosos o de corta duración. La Iglesia Ortodoxa Griega, que luego se ha ido fragmentando, al romper con el papa y con la Iglesia Católica, rompen con ello con el vínculo de unidad, de aquí sus divisiones en iglesias regionales contrario al Espíritu Santo, Espíritu de unidad, de orden y verdad.

Para acceder a tópico III, tema II, accede aquí.

Más sobre el tema de la unidad:

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